Con su ventana natural que recuerda un corazón estropeado, es uno de los puntos más visitados del Parque Nacional Los Haitises.
Luego de un recorrido entre manglares a lo largo del río Caño Hondo y una espectacular entrada a las aguas abiertas de la bahía de San Lorenzo, el bote gira a la izquierda, serpentea entre los mogotes y de allá para acá, tras realizar las paradas de rigor de la excursión, se dirige a la playa desde donde se accede a la cueva.
El suelo de arena da nombre a una de las cavernas más visitadas del Parque Nacional Los Haitises, en la provincia Hato Mayor, facilitando la caminata por la sala principal, de techo alto y algo luminosa.
¿Qué ver? Así, de primera, sus ventanas naturales.
En sus alrededor de 940 metros cuadrados se han registrado cinco aperturas. La más impresionante es un mirador cuya forma de corazón estropeado se ha convertido, junto a los mogotes, en un símbolo de esta frágil área protegida.
Desde esta ventana de roca caliza se observan varios mogotes y la franja verde que sirve de encerrona a las aguas de la bahía de San Lorenzo.
En ocasiones, el agua que entra por los “ventanales” deja el suelo salpicado de pequeños charcos. También filtra agua por el suelo, pues la cueva se encuentra prácticamente en línea con el mar.
Legado histórico
Como atractivo cultural, la cueva de La Arena atrae también por su arte rupestre. Habitada por los taínos, se han reportado seis petroglifos, veintidós pictografías y dos bajorrelieves de figuras antropomorfas. Una de las pictografías más valoradas por los espeleólogos es la que representa la llegada de los españoles a la isla, hace ya 532 años.
– Solo se accede a la cueva en bote.
– La gruta está ubicada en el municipio Sabana de la Mar, a unos 13 kilómetros al oeste (de recorrido en auto y luego en bote) de su centro urbano.
– Es una de las cavernas más visitadas de Los Haitises, junto a la cueva de La Línea y la cueva de San Gabriel.
– Como es una de las cuevas más cercanas a la desembocadura de los ríos Caño Hondo y Jibales, suele ser una de las últimas paradas de las atracciones en el litoral.