Luego mostrarse totalmente estables, han perdido cuatro series consecutivas por primera vez en la temporada.
Los Yankees de Nueva York parecían caminar en el paraíso hasta hace dos semanas, desde entonces, la trayectoria luce haber cambiado hacia el “infierno”.
Durante los primeros 72 partidos de la temporada todo le había salido bien: sus abridores y el cuerpo de relevo estaban prácticamente imbatibles, y contaban con lo que había sido la gran ausencia en las últimas temporadas: salud de sus bateadores.
Pero, “la felicidad duró poco”, o al menos es lo que parece. Los Yankees no solamente han perdido cuatro series consecutivas, sino que la ventaja que tenían en su división sobre los Orioles de Baltimore ha desaparecido.
Tras el radical cambio que los Yankees han dado para mal en sus últimos 11 partidos, surge entonces la siguiente pregunta: ¿En qué están fallando?:
1. Se cayó el picheo
No hay dudas de que si había algo que realmente sostenía a los Yankees era la destacadísima labor de sus lanzadores, principalmente los abridores.
En los primeros 72 juegos de la temporada, los Yankees tenían efectividad de 2.77, siendo esa la mejor de toda las Grandes Ligas, y parecía que podía estar incluso mejor, pues debutaría el actual Cy Young Gerrit Cole, sin embargo, fue todo lo contrario.
En los últimos 10 partidos, sin incluir el de este jueves contra los Azulejos de Toronto, los del Bronx tienen efectividad de 8.04, la peor de MLB. En ese lapso Cole ha lanzado dos veces y tiene efectividad de 9.00.
Los Yankees también han sufrido el descenso del dominicano Luis Gil, quien pasó de ser el líder de efectividad de toda la liga hasta hace 11 días, a permitir 12 carreras limpias en 5.2 entradas lanzadas en sus últimas dos aperturas.
Los del Bronx han permitido 104 carreras desde el 8 de junio. El único equipo que ha recibido más en ese lapso son los Rockies de Colorado con 116.
2. Lesiones
Antes de iniciar la campaña los Yankees sabían que al menos tres peloteros claves estarían fuera: Joanthan Loaisiga (todo el año), Dj LeMahieu y Cole.
Aún sin ellos, comenzaron la temporada de forma espectacular. Gil hizo que no se sintiera la falta de Cole, y el trío de “Juan Soto-Aaron Judge-Giancarlo Stanton” eran los mejores 2-3-4 de toda Las Mayores, hasta que se lesionó el último.
Stanton, jugando exclusivamente como bateador designado, estaba en su inicio de temporada más saludable desde que pertenece a los Yankees, pero nueva vez sufrió una lesión en la corva que lo mantendrá fuera de acción por lo menos dos meses.
La lesión de Stanton fue antecedida por la del primera base titular Anthony Rizzo, quien en una corrida de home a primera sufrió una fractura en el cuello. Su lugar en la alineación lo tomó el novato Ben Rice, a quien llamaron desde Triple A, pero no ha tenido hasta el momento una actuación impactante.
Antes que a Rizzo, los Yankees también perdieron al abridor Clarke Schmidt, quien estaba en su mejor año como lanzador con efectividad de 2.52.
A todo esto, se le debe añadir el mal momento de algunos jugadores que se supone deben ser claves en la ofensiva: En los últimos cinco juegos sin contar el de este jueves, Alex Verdugo bateaba de 19-2, Soto de 15-3, Anthony Volpe de 21-4, Gleyber Torres de 17-2, este último incluso fue relegado a la banca, tomando su lugar en segunda el venezolano Osvaldo Cabrera.
Tras la derrota de este jueves ante Toronto, los Yankees han perdido el primer lugar de la División Este, puesto que ahora ocupan los Orioles de Baltimore.
La última vez que los Yankees no estuvieron en el primer lugar fue el pasado 12 de mayo.