Peligro de inflación. La propuesta del gobierno podría “exacerbar” las expectativas inflacionarias, según la economista Mercedes Carrasco.
Cuatro economistas —entre ellos dos extitulares de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII)— expresaron ayer su oposición al Proyecto de Ley de Modernización Fiscal que impulsa el gobierno, tras considerar que es un duro golpe a la estabilidad macroeconómica.
Al participar en el foro “Diálogo Fiscal, Desafíos y Oportunidades”, moderado por el senador Omar Fernández, la economista Mercedes Carrasco calificó la propuesta de reforma fiscal de “regresiva, agresiva y abusiva”.
Carrasco explicó cada concepto. Regresiva, porque, a su juicio, el 72% de los tributos son “impuestos indirectos”, por lo que, en ese caso, se estarían gravando con impuestos a las bebidas alcohólicas y azucaradas, y el 28% a las personas con “riqueza”.
Los otros dos términos: “agresiva” y “abusiva”, por la cantidad de bienes que podrían tener impuestos en caso de aprobarse la reforma fiscal, de acuerdo con la experta.
“Nunca antes, en los 40 años de historia del IVA o Itbis, se había entrado tantos rubros de la canasta (básica familiar). 120 productos entran de frente en el grupo alimentos. Es como si usted fuera a la góndola del supermercado y todos los pasillos tuvieran Itbis”, dijo Carrasco.
Y siguió: “120 productos que pasan de 0 a 18% (de Itbis). Siempre hubo una forma gradual. Pasó del 6% al 8%, del 8% al 12%. Nunca se había experimentado una forma tan brutal de cantidad y de tasa al mismo tiempo”.
La economista, además, señaló que esa propuesta del gobierno podría “exacerbar” las expectativas inflacionarias, e indicó que, incluso, ya se habla de unos niveles que podrían alcanzar hasta un 3% de inflación, “que es mucho”.
“No es el momento político ni económico de esta reforma. Estamos entrando en un terreno movedizo”, dijo mientras participaba en el foro: “Diálogo Fiscal, Desafíos y Oportunidades”.
Al señalar que en los últimos años ha habido una “eficiencia nula” en la recaudación tributaria, Carrasco dejó una reflexión abierta: “¿Vamos a hacer una reforma fiscal con esos administradores, gerentes que fueron capaces de recaudar…?”.
Magín Díaz
El exdirector de la DGII, Magín Díaz, dijo que será un “reto” una eventual aprobación de la reforma fiscal, y señaló que, de momento, no le queda claro que la actual administración esté “preparada para manejar una reforma”.
La propuesta del gobierno, que ya fue enviada al Congreso Nacional, ha generado el rechazo de una gran parte de la sociedad y de algunos sectores productivos del país por el golpe económico que, según han expresado, podrían recibir en caso de aprobarse.
“Creo que tiene puntos buenos, pero tiene muchos errores de diseño”, dijo el economista mientras participaba en el foro.
Díaz se refirió a la propuesta del gobierno que contempla una única tasa de un 18% para el impuesto a la transferencia de bienes y servicios industrializados (Itbis), que pasaría a llamarse “impuestos al valor agregado (IVA)”.
Tras explicar que ese cambio se conoce como “Itbis personalizado”, el exdirector de la DGII apuntó: “A 18% está duro. Tal vez que hay que hacer dos tasas: de 6% a 8% o 18%. Ahí hay que tener cuidado. No estamos en la antesala de una crisis para hacer una reforma de choque de esa magnitud”.
Uno de los objetivos principales del gobierno, con esa reforma, es aplicar ‘mano dura’ en la persecución de la evasión y elusión fiscal mediante “reglas claras e iguales para todos” los contribuyentes.
Para el economista, sin embargo, sería todo lo contrario: “La reforma puede aumentar la evasión. De hecho, porque se están aumentando impuestos que no se deben aumentar, como el de los alcoholes”.
Díaz, además, afirmó que no hay evidencias o registro de una gran lucha contra la evasión fiscal en los pasados cuatro años del gobierno de Luis Abinader.
Eliminación de incentivos
La economista y exdirectora de la DGII, Germania Montás, dijo que no es una buena idea la eliminación de las leyes de incentivos fiscales que plantea la propuesta del gobierno, y apuntó que debe de haber mecanismos para que, una vez se eliminen estos privilegios, se resuelva un problema real de la inversión.
Montás defendió el papel de las exenciones que disfrutan distintos sectores productivos del país, al señalar que han jugado un rol durante décadas.
“No es una buena idea”, comentó la economista en el foro, que se celebró en el hotel JW Marriot del Distrito Nacional.
Montás, sin embargo, consideró que las leyes de incentivos fiscales tienen mucho que corregir, pues, a su juicio, dificultan la gestión tributaria.
Impuesto regresivo
El economista Jaime Aristy Escuder se refirió a la ampliación de la base del Itbis que contempla el proyecto de reforma fiscal, y señaló que las listas de exenciones dan como resultado una especie de “agujeros”, que les permiten a los agentes económicos “escaparse”. Esto, según Escuder, “aumenta la evasión” fiscal.
“Para reducirla muchos países lo que hacen es reducir la lista de bienes exentos y de esa manera, al ponerlos a pagar a todos, se genera una mayor información que permite la reducción de la evasión”, dijo.
Y añadió: “El Itbis o IVA es un impuesto regresivo porque recae, principalmente, sobre los segmentos más pobres, en términos relativos”.