Servio Tulio Castaños Guzmán, vicepresidente ejecutivo de Finjus, y Trajano Vidal Potentini, presidente del Colegio de Abogados, plantearon diseñar un Plan Nacional de Cámara de Vigilancias en los centros penitenciarios y su entorno.
La Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) y el Colegio de Abogados de la República Dominicana (CARD), advirtieron sobre la importancia de disponer de video-vigilancia en las cárceles y plantearon la necesidad de crear un plan nacional de sistema de cámara de vigilancia en todos los centros penitenciarios del país y su entorno.
El vicepresidente ejecutivo de Finjus, Servio Tulio Castaños Guzmán, y Trajano Vidal Potentini, presidente del CARD, consideran que es inaceptable que en “la era de la información que se vive en pleno sigo XXI, todavía existan recintos penitenciarios desprovistos de mecanismos digitales, como las cámaras de video vigilancia u otros dispositivos inteligentes”.
Castaños Guzmán dijo que es aún más penoso que en algún centro penitenciario se disponga de alguna herramienta, pero que no funcionan, y si lo hacen la información que producen no es procesada para corregir los fallos del sistema o incrementar la eficiencia interna.
“Esta situación es altamente preocupante, sobre todo porque la República Dominicana posee un modelo de Estado que debe garantizar el ejercicio de los derechos fundamentales, sino también su protección plena, a través de una serie de medios y recursos de carácter integral”, expresó Castaños Guzmán al referirse al editorial del Listín Diario de ayer titulado “Cárceles mal vigiladas”, que cuestiona que los centros penitenciarios carezcan de sistemas de vigilancia profesional, como las cámaras de video.
Dijo que es preocupante por el peligro inminente para la seguridad e integridad de los internos de los centros, sino que también es una amenaza constante para los servidores públicos que laboran en ella y para los visitantes, pues no hay un sistema certero que permita asegurar la captación, monitoreo y almacenamiento de información que podría ser de interés.
Indicó que al no haber registros audiovisuales, las investigaciones no tienen calidad y no sirven para establecer responsabilidades en casos que involucren fugas, revueltas y riñas.
Señaló que es hora de que las cárceles dejen de ser centros de desorden y sean organizadas y funcionen para que cumplan con el propósito de promover la reinserción social de quienes se han desviado de las normas legales y sociales.
Planteó que se hace urgente implementar todas las medidas que aseguren la vigilancia y protección de las personas en esos ambientes y garanticen las condiciones de vida digna que la Constitución y las leyes disponen en los recintos penitenciarios.
Vidal Potentini
De su lado, Vidal Potentini dijo que el gobierno tiene que ir en auxilio del sistema penitenciario para resolver un tema tan complicado, tal como se está haciendo con los bloqueadores de señales en los recintos penitenciarios.
Indicó que es preocupante que pleno siglo XXI se diga que ni siquiera en los entornos perimetrales de los recintos carcelarios se tengan instaladas cámaras de vigilancia.
“Esto es grave, el Poder Ejecutivo tiene que actuar en consecuencia en un asunto tan elemental como es el problema de las cárceles del país”, acotó el jurista.
Vidal Potentini sostuvo que es lamentable que se continúen desvelando fallas graves en materia de seguridad pública, porque “decir que en los actuales momentos no hay un sistema adecuado perimetral de vigilancia de las cárceles del país llama a preocupación”.
Indicó que las cámaras hoy por hoy tienen que estar no solo en las cárceles, sino en todos los negocios, que sirven de importancia a nivel de la seguridad pública.
Decir que en las cárceles no tienen sistema de vigilancia es algo grave, por lo que este reclamo debe ser atendido por el Poder Ejecutivo, como rector y jefe de la política criminal.
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